lunes, 24 de marzo de 2008

Hechizos de protección

magia de protección proyectada hacia una persona querida

Crearemos un pequeño altar sobre una mesa que cubriremos con un paño blanco y en su centro pondremos un vaso lleno de agua de coco fresco en el que habremos introducido un pequeño cuarzo. A su derecha, una vela también blanca y a su izquierda nuestro caldero con un poco de miel. Prenderemos la vela, tomaremos la fotografía con ambas manos y, mientras efectuamos en voz alta la petición, sumergiremos la foto en el interior de vaso. Seguidamente, derramaremos cuatro gotas de miel, formando una cruz sobre el agua.
Cuando la vela se haya consumido, depositaremos los restos de cera en el interior del vaso. Cubriremos todo el conjunto con el paño y lo dejaremos reposar 24 horas.
Transcurrido este tiempo, pondremos el cuarzo y lo que quede de la fotografía bien escurrida en una bolsa blanca y la regalaremos, como amuleto, a la persona a proteger.

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para alejar la maldad de origen desconocido o misterioso

Cada vez que en el cielo luzca la Luna menguante, deberemos esparcir perejil fresco en la cabecera y los pies del interior de nuestra cama. Dormiremos una noche con él y, al día siguiente, lo recogeremos y depositaremos en el interior de un recipiente de vidrio transparente.
Pondremos el mágico elemento encima de la mesita de noche y le introduciremos también una fotografía propia y una estampa, medalla o amuleto en el que tengamos fe.

Cuando llegue la próxima Luna menguante renovaremos el ritual, procederemos a quemar todos los elementos del mismo junto a un buen puñado de romero tirando las cenizas a un lugar donde corra el agua.

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fumigación para protejer la casa de robos

Ingredientes:

Un recipiente de cobre.
Alcohol de 90 grados.
10 gotas de esencia de eucalipto.
10 gotas de esencia de pino.
1 ramita de roble y una amatista de pequeño tamaño.
1 botella con vaporizador.
Preparación:
En un lugar alejado de las miradas de los demás, pero en el exterior de nuestra casa, por ejemplo en el quicio de una ventana, o en el suelo del balcón o terraza, pondremos a macerar en el recipiente todos los ingredientes sumergidos en el alcohol durante una fase completa de Luna creciente. Cada día, tan pronto como anochezca, agitaremos la mezcla. Pasada la lunación, traspasaremos el mágico líquido del caldero a la botella con vaporizador y ya podemos fumigar con el preparado todas las esquinas de las habitaciones de nuestra casa.

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baño de energías tras visitas indeseables

Luego de despedir a esas visitas que sabemos tienen energía negativa o malas intenciones, pondremos en un recipiente medio litro de agua hirviendo junto a diez cucharadas de café natural. Llenaremos la bañera o una tina con agua muy caliente y derramaremos en su interior cuatro tazas de café. Nos bañaremos completamente restregándonos el cuerpo por completo por espacio de unos cinco minutos y, seguidamente, tras secarnos, nos daremos un masaje por todo el cuerpo con unas cuantas hojas de roble mezcladas con menta.

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para protegernos de los ataques energéticos nocturnos

Si no logramos descansar de forma efectiva y nos despertamos más cansados que antes de acostarnos, puede suceder que estemos siendo víctimas de un ataque energético. Para lograr que el mismo no nos afecte, dibujaremos debajo de la cama un círculo con una mezcla de sal y pimienta verde. En su centro pondremos un recipiente de vidrio con agua en la que habremos introducido un cuarzo rosa, 20 gotas de esencia de magnolia y siete flores de té de roca. Deberemos renovar el contenido del recipiente a diario durante nueve días.

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limpieza de la malas energías

Pondremos a hervir en un caldero dos litros de agua junto a un pellizco de ruda, un centímetro de raíz de regaliz, tres monedas de cobre, un puñado de sal gorda, una copa de brandy y un pedacito de raíz de mandrágora. Lo colaremos y procederemos a fregar las habitaciones conflictivas. Los restos, es decir, los productos puestos a hervir, deberemos enterrarlos en una maceta de nuestra casa que contenga un rosal.

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agua mágica para limpiar la casa de agresividad e incompresión

En el cubo de fregar pondremos agua muy caliente, un vaso de vinagre, un vaso de sal, un vaso de infusión hecha con un puñado de ruda y otro de perejil fresco, lo mezclaremos bien y fregaremos la casa «a mano», renovando el contenido del cubo, cada vez que debamos repetir la operación en cada habitación.
Potenciaremos su efecto si también limpiamos con el indicado líquido las partes bajas de los muebles y el alto de librerías y armarios.
Siempre que efectuemos esta práctica debemos hacerlo de forma muy relajada y concentrados.

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